El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, recorrió junto a un grupo de colaboradores una de las Unidades Febriles de Urgencia (UFU) que el ejecutivo local instaló en el hospital Penna del barrio porteño de Parque Patricios para atender de forma segura a pacientes con síntomas compatibles con el coronavirus.
En medio de la obligatoriedad del uso de barbijo el alcalde a través de su Jefe de Gabinete Miguel, instó a ministros y colaboradores más cercanos a visitar los centros de salud de la ciudad y controlar que todo esté funcionando con normalidad.
La ciudad implementó la vacunación obligatoria para los grupos de riesgo. Al mismo tiempo, instaló las UFUS en 18 hospitales públicos con el objetivo principal de evitar las aglomeraciones en las guardias de los centros sanitarios y brindar una atención rápida y segura a aquellas personas que, después de determinados exámenes, presenten síntomas de la enfermedad.
«El objetivo de estas unidades es que no haya ninguna posibilidad de contacto entre los casos sospechosos y el resto de las personas», sostuvo Rodriguez Larreta, quien además agregó que «las primeras medidas fueran anunciadas cuando ni siquiera había un caso en la Argentina».
«Trabajamos para anticiparnos, tomando la experiencia de otros países», dijo durante la visita, en la que estuvo acompañado por el vicejefe jefe de Gobierno, Diego Santilli; y el ministro de Salud, Fernán Quirós.
Los 280 metros cuadrados que tienen cada una de las UFU estás distribuidos en tres sectores, uno de evaluación inicial, otro de exámenes más específicos y una última instancia de aislamiento transitorio.
Estas salas instaladas en los predios externos de los hospitales están destinadas a personas con síntomas de Covid-19 (más de 37,5 grados de temperatura, tos, mocos y dificultades para respirar) y así evitar que vayan a las guardias de los CeSAC (Centros de Salud y Acción Comunitaria) o de los hospitales.
