Las proyecciones de cosecha para los granos gruesos sufren recortes cada semana, situación que también representa un incremento en las estimaciones de pérdidas económicas para los productores.
De acuerdo a la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), en soja de primera se espera un recorte de 60% en los rindes, que serán hasta 2.000 kilos menos por hectárea.
En el caso de campos propios, esta caída en el volumen de cosecha dejará un margen neto que oscilará entre los U$S 104 a favor y un recorte de U$S 535 por hectárea.
En campos alquilados, los números son rojos, con pérdidas entre los U$S 635 y U$S 1.297 por hectárea. Las malas noticias para la oleaginosa no paran, y en la última semana los lotes de primera en condiciones malas y regulares aumentaron un 10% y estas condiciones se extienden sobre el 85% del área en la región núcleo.
“La expectativa en el rinde promedio de la región sigue tambaleándose”, remarcaron. En este contexto, explicaron que los 2.000 kilos por hectárea de pérdida pueden ser mayores con el correr de los días.
En el caso de la soja de segunda, el escenario también es complejo. En el área de influencia de la BCR, un 95% del cultivo transita un estado de regular a malo y las chances de recuperación son cada vez menores.