El gobierno nacional realizó un cambio de enfoque territorial frente a la pandemia en el conurbano.
De reparto de alimentos y asistencia social es coordinado por el Ejército Nacional en la distribución y logística, al que se le suma al apoyo territorial de La cámpora y de algunas organizaciones sociales.
El Presidente adoptó esta iniciativa luego de observar que en los distritos más populosas del conurbano no existía una contención ni un plan de aislamiento efectivo, por lo que se optó por cambiar el enfoque e incluir al ejército.
La primer bajada al conurbano con tanques y camiones de guerra fue en Quilmes, en el municipio que gobierna Mayra Mendoza, militante de la organización kirchnerista La Cámpora. En ese municipio el último martes comenzó el operativo de ayuda social del ejército Allí los soldados montaron una base de operaciones y de concentración en el estadio del Club Quilmes y en un predio de la cervecería y maltearía Quilmes.
La tarea oficial es de asistencia. Sin embargo el ejército sólo reparte comida y se muestra en las calles como acción preventiva frente a cualquier desborde que puede suceder. La labor oficial, en el territorio consiste en ayudar con la entrega de bolsones de comida en los barrios más carenciados. La segunda, aunque no se diga abiertamente, como impacto visual, para que en las zonas más «calientes» la gente vea la presencia de las Fuerzas Armadas.
El ejército continuará con los operativos en otros municipios de la provincia. Desde el jueves se hizo base en La Matanza y en las próximas horas se extenderá hacia: Moreno, Merlo y San Fernando.